- El modelado 3D se ha vuelto accesible gracias a herramientas gratuitas y plataformas en la nube.
- Existen múltiples formas de construir modelos 3D: desde software de escritorio hasta editores online.
- Dominar conceptos como extrusiones, subdivisiones y triangulación es clave para modelos más detallados.
- Combinar creatividad y técnica permite plasmar ideas en objetos tridimensionales listos para impresión o videojuegos.
El modelado 3D ha dejado de ser exclusivo de expertos en animación o diseño industrial. Hoy en día, gracias a herramientas gratuitas y accesibles, cualquier persona con interés y creatividad puede empezar a crear sus propios modelos tridimensionales para videojuegos, impresión 3D, visualización de proyectos arquitectónicos o simplemente como hobby.
En este artículo vamos a explicarte paso a paso cómo hacer un modelo 3D desde cero, utilizando software gratuito o basado en la nube. También explicaremos algunos conceptos técnicos clave, como el uso del editor de modelos, técnicas de extrusión, subdivisión de caras y cómo crear formas complejas a partir de figuras básicas. El objetivo es que termines esta guía con una idea muy clara de por dónde empezar y cómo avanzar en esta fascinante disciplina.
¿Qué es el modelado 3D?
El modelado 3D es el proceso de crear representaciones digitales tridimensionales de objetos. Estas representaciones pueden usarse en videojuegos, animaciones, arquitectura, diseño industrial o impresión 3D. Un modelo 3D se compone de vértices, aristas y caras que forman una malla (mesh) que define la superficie del objeto.
Para construir estos modelos, se utilizan programas especializados que permiten crear y modificar formas directamente en un espacio tridimensional. Algunos de estos programas operan desde el navegador y funcionan en la nube, mientras que otros requieren instalación en el ordenador.
Una herramienta muy popular y gratuita para iniciarse es el Editor de modelos de Visual Studio. También destacan otras opciones como el renderizado en la nube de Pacdora, que no requiere prácticamente potencia de hardware local.
Primeros pasos con el Editor de modelos
Una de las formas más didácticas de comenzar a modelar consiste en construir un objeto simple, como una casa. Este ejemplo permite entender rápidamente las herramientas básicas del modelado: agregar formas, seleccionar caras y bordes, subdividir superficies y extruir partes del modelo.
Al iniciar el Editor de modelos, asegúrate de tener visibles las ventanas de “Propiedades” y “Cuadro de herramientas”. Son esenciales para interactuar con el entorno de trabajo y modificar las formas que vayas creando.
Creando la base: un cubo como estructura inicial
El primer paso para empezar a modelar es añadir un cubo a la escena. Este cubo servirá como base para construir la estructura de la casa.
- Desde la herramienta de formas, elige “Cubo” y colócalo sobre la superficie de diseño.
- Cambia al modo de selección de cara para trabajar con partes específicas del cubo.
Una vez colocado el cubo, selecciona la cara superior y utiliza la herramienta “Subdividir cara”. Esto divide esa cara en cuatro partes iguales, creando nuevos vértices que te permitirán trabajar con mayor precisión en detalles como techos o salientes.
Para añadir volumen a la estructura, selecciona dos caras adyacentes del cubo y utiliza la herramienta “Extruir”. Esto hace que esas partes se proyecten hacia afuera, generando nuevas formas (como paredes sobresalientes).
Manipular y triangular para mayor realismo
Después de crear extrusiones, puedes usar la herramienta “Trasladar” para mover los elementos extruidos y darles una forma más realista. Esto se hace arrastrando los manipuladores de traslación en la dirección deseada.
Una vez que la forma básica está establecida, es conveniente aplicar una triangulación. Esto convierte las caras cuadradas o poligonales en triángulos, que son la forma más estable y ampliamente usada en motores gráficos (como Unity o Unreal). Esta operación se realiza fácilmente desde el menú de herramientas avanzadas.
Construcción del techo
El techo se genera seleccionando los bordes superiores del cubo. Cambia al modo de selección de borde, activa el cubo y selecciona los bordes deseados manteniendo presionada la tecla Ctrl para múltiples selecciones.
Con los bordes seleccionados, usa nuevamente la herramienta “Trasladar” para levantar estos bordes hacia arriba, formando así el tejado de la casa. Esta técnica es muy eficiente para estructuras inclinadas o simétricas, como techos a dos aguas.
Renderizado en la nube: una alternativa ligera
Para quienes no disponen de un equipo potente, las soluciones de modelado y renderizado en la nube como Pacdora suponen una alternativa ideal. Esta plataforma realiza el procesamiento gráfico desde servidores remotos, lo que libera al equipo del usuario y permite trabajar fluido incluso desde dispositivos modestos como iPads o portátiles antiguos.
Otras ventajas clave de esta tecnología son:
- Compatibilidad con macOS y Windows.
- Diseño multiplataforma, funcional en casi cualquier dispositivo.
- Alta estabilidad operativa con protección frente a pérdidas de archivos.
¿Qué otros programas puedes usar para modelar en 3D?
Además de Visual Studio y Pacdora, existen muchas herramientas gratuitas y accesibles para iniciarte:
- SketchUp Free: ideal para arquitectura y diseño interior.
- Blender: más avanzado, pero completamente gratuito y con miles de tutoriales.
- TinkerCAD: muy intuitivo, ideal para niños o iniciación rápida.
Escoger un programa dependerá de tus objetivos: si es para imprimir en 3D, realizar videojuegos o simplemente aprender técnicas básicas. La mayoría de estas herramientas tiene curvas de aprendizaje distintas, pero todas te permitirán iniciar sin coste alguno.
Con estas herramientas y conocimientos, cuentas con una base sólida para comenzar a crear modelos 3D. Ya sea que decidas empezar con formas simples como una casa o que te aventures con diseños más complejos, la práctica constante y la exploración de las herramientas te ayudarán a mejorar. La creatividad combinada con una técnica adecuada dará lugar a modelos que no solo tienen forma, sino también propósito.